Según apunta Gartner, el 2015 será el año en el que las tecnologías analíticas se integrarán, de forma invisible, en todas las aplicaciones, de manera que las empresas deberán hacer frente a la gestión de enormes cantidades de datos y ofrecer la información correcta a las personas adecuadas, en el momento justo. Así que para Gartner el valor estará en las respuestas y no en los datos.

Conceptos como el internet de las cosas y el big data ya nos resultan familiares y es que la hiperconectividad está llegando a límites insospechados con multitud de objetos que se conectan a internet. Gracias a ello se dispondrá de cantidades ingentes de información sobre los consumidores que las empresas aprovecharan para desarrollar sus estrategias de marketing. Sin embargo, para Gartner el reto está en que las empresas desarrollen servicios e información para estos consumidores, a través de los nuevos soportes conectados, antes de que los soliciten.

Las posibilidades que se abren en este nuevo mundo son inmensas. Por ejemplo, Gartner pronostica que la impresión 3D seguirá abaratándose y que las ventas mundiales crecerán en el 2015 un 98%, duplicándose en el 2016. Con estos datos ¿quién se atreve a quedarse fuera?